Las lluvias que se abaten sobre zonas del país, asociadas a altas temperaturas, son el caldo de cultivo ideal para la aparición del mal, señalaron autoridades del ministerio de Salud que puntualizaron además la influencia de los múltiples casos que se están dando en Argentina y Brasil.

Aunque de momento Uruguay es un país libre de dengue las autoridades no son muy optimistas respecto de mantener esta condición.

El director general de Salud, Jorge Basso, dijo al diario El País hoy que una vez que se instala el dengue autóctono "es casi imposible eliminarlo" a la vez que el subsecretario de Salud, Miguel Fernández Galeano, consideró "altamente probable" que se produzcan casos de personas infectadas en el territorio nacional.

Este año en el país hubo hasta ahora cinco personas infectadas con la enfermedad, pero todos los casos fueron importados, es decir, trajeron el virus desde otros países de la región.

Basso enfatizó que se debe evitar que la enfermedad se instale y para ello consideró vital la lucha contra el mosquito transmisor, el Aedes aegypti, insecto que si bien es imposible eliminar sí puede al menos evitarse su reproducción masiva, precisó.