El fin de semana fue agitado para la coalición de izquierda, a la sorpresa e indignación producida por los dichos del candidato se sumó una severa reprimenda que desde EEUU le hiciera el Presidente Tabaré Vazquez, la cual tampoco cayó bien dentro del Frente Amplio. Para el mandatario el candidato decía estupideces. De modo que ante toda esta avalancha de insucesos la coalición de izquierdas decidió llamar a un cónclave para así reorganizar a la tropa, víctima del fuego cruzado y además amigo.

La cosa no pintaba fácil, pues entre los "idiotas" comunistas, calificados así por el propio Pepe, la maquinaria socialista de acaparar de cargos de gobierno (esto también según el Pepe), y todos los otros integrantes de la "izquierda bobalicona que se come la pastilla de los derechos humanos" (siempre según el Pepe), había que poner paños fríos al entuerto para reencausar las maltrechas huestes frenteamplistas tras el líder de turno, o sea el mismo que los califico de idiotas, bobalicones derecho-humanistas, ávidos de cargos, admitiera además que vienen de un gobierno que ha fracasado, y de quien el presidente de la república se refiere en los foros internacionales como alguien que dice estupideces.

Y por si esto ya parece bastante complicado, todavía había que elegir un mediador.

¿Quien sería?

El candidato a la vicepresidencia Danilo Astori, de quien se dijo ( y usted no tendrá muchas dificultades en averiguar quién) que era una persona con quien es duro negociar, cosa que era mucho más fácil con Alberto Bensión y con Alejandro Atchugarry, ambos ministros de Economía del Gobierno de Jorge Batlle(período 2000-2005), cuando la fuerza que encabeza hoy Mujica era oposición. Astori por su parte, tampoco ahorró descalificativos para Mujica, pues durante la campaña por las internas presidenciales lo catalogó como oscurantista además de poco serio e incoherente.

La oposición seguira machacando con dichos de Mujica y cuestionando publicidad oficial

Ante este panorama uno pudiera pensar que este no tendría mucho que hacer en el cónclave, sin embargo logró imponer su punto de vista y convenció a sus compañeros de dar a la campaña un giro más programático, o sea haciéndo más énfasis en propuestas de gobierno mas que en protagonismos personales, y luego todos coincidieron y el Pepe aceptó, que si quieren ganar las elecciones este debe llamarse a silencio como también lo sugirió el Presidente de la República, y ceñirse a los lineamientos generales de la campaña.

Sin embargo, aún persiste en el Frente Amplio el temor de que dichas actitudes y dichos hayan causado un gran daño a su imagen entre los votantes de centro indecisos, sin embargo tiene confianza en poder revertir la situación en el tiempo que queda hasta el 25 de Octubre, día de los comicios.

La oposición por su parte insistirá con las declaraciones de Mujica contenidas en el libro "Pepe Coloquios" y centrará su campaña en cuestionar la publicidad del gobierno exhibiendo logros de su gestión.

Cónclave del Frente Amplio decidió dar nuevo rumbo a la campaña