Tres personas murieron y 42 resultaron heridas este martes al explotar un coche bomba al paso de un vehículo de la policía en Diyarbakir, principal ciudad del sureste de Turquía y de mayoría kurda, anunció la agencia Anatolia.

Inicialmente, las víctimas eran 45, doce policías y 33 civiles. Tres personas murieron en el hospital a causa de sus heridas, detalló el Gobierno de Diyarkabir en un comunicado, sin brindar más precisiones.

El ataque fue atribuido por medios de comunicación turcos al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), que reactivó la lucha armada contra las fuerzas de seguridad turcas el pasado verano, tras una tregua de dos años.

A bordo del vehículo policial se hallaban sospechosos detenidos durante una redada en círculos kurdos próximos al PKK, según el comunicado.

Los enfrentamientos entre los rebeldes y las fuerzas de seguridad son diarios en el sureste de Turquía, de mayoría kurda, tras la reanudación de las hostilidades hace casi un año. Desde que el PKK tomó las armas en 1984 han muerto 40.000 personas a causa del conflicto.

El pasado 31 de marzo siete policías perdieron la vida en un atentado similar en las afueras de Diyarbakir, en vísperas de una visita del primer ministro, Ahmet Davutoglu, a la ciudad.

Por otro lado, dos policías murieron este martes al explotar una bomba artesanal en la provincia de Ban, igualmente en el sureste de Turquía. Además cinco militares resultaron heridos en la vecina provincia de Mardin al estallar una bomba al paso de su convoy.