Los hechos se dieron lugar en la ciudad canaria de Las Piedras cuando dos jóvenes ingresaron a la vivienda de Vista Beatriz Fuentes Murchio en la calle 19 de abril casi Tabaré. Según informa el matutino LA REPÚBLICA, vecinos de la víctima vieron a dos jóvenes retirarse de la vivienda en forma sospechosa por lo que fueron a ver si todo estaba en orden. Trágico fue el panorama con el que se encontraron en la finca. Allí yacía en el piso la octogenaria con su cabeza destrozada.

De inmediato se dio aviso a las autoridades policiales las cuales en pocos minutos se hicieron presentes en varios móviles policiales en el lugar de los hechos para comenzar a tomar declaraciones a los distintos vecinos de la víctima. A su vez se daba cuenta de la causa de la muerte: la brutal golpiza en su cráneo.

Según parece, la señora intentó evitar el delito resistiéndose, a lo cual uno de los mal vivientes tomó un palo que allí se encontraba y le propinó la golpiza que causara su deceso.

Luego de recabados los datos que los vecinos aportaron, los efectivos de la seccional 21ª iniciaron su recorrido el cual, en tan solo unos minutos dio sus primeros frutos cuando identificaron a un joven que concordaba con los datos aportados por dichos vecinos. Se procedió entonces a detener a un hombre morocho el cual vestía una camiseta de futbol color rojo. El mismo, además tenía rastros de sangre en su calzado. Dicho individuo, al percatarse de la presencia de los uniformados, intentó perderlos quitándose la camiseta pero los policías de inmediato procedieron a detenerlo.

El sospechoso indicó a los agentes quien había sido su cómplice, el cual fue detenido minutos más tarde. Sin embargo, el caso no acabaría ahí ya que para sorpresa de todos, los dos jóvenes de veintidós años de edad declararon haber tenido una cómplice quien habría entregado la información de que la víctima poseía el dinero de su jubilación la cual, había cobrado ese mismo día. Esa mujer resultó ser vecina de la anciana por lo que los móviles policiales nuevamente concurrieron al barrio para detener a la mujer de cuarenta y seis años de edad.

Grande fue el asombro de los lugareños cuando los efectivos policiales la detuvieron. La misma mujer tan solo unos momentos antes había estado llorando con el hijo de la víctima tratando de darle consuelo por la muerte de su madre.

La detención de las tres personas involucradas en este macabro homicidio se produjo a tan solo dos horas de haberse perpetrado el homicidio gracias a una rápida y efectiva labor policial.

El dinero sustraído por los delincuentes… $4000.